Tarima Flotante y Suelo Vinílico
Las tarimas flotantes consiguen un acabado muy similar a las maderas macizas, pero con la gran ventaja de que no requieren ningún tipo de mantenimiento, ni lijados, ni barnices, ni ninguna premisa especial ni delicada. Se presentan completamente terminadas de fábrica, y se instalan mediante sistema clic, por lo tanto no se requiere ningún tipo de cola ni pegamentos y se trata de un montaje rápido y sencillo.
Por lo general son suelos con una alta resistencia a golpes e impactos, con un mantenimiento muy fácil ya que se pueden fregar tantas veces como queramos con productos neutros, se pueden instalar también sobre calefacción radiante y nos ofrecen unas garantías de aproximadamente 20 – 25 años.
Hoy día existen tarimas flotantes especiales también para las estancias de baños y cocina, donde necesitamos un pavimento con una fabricación especial e idóneo para estas zonas. Podemos disfrutar de la calidez de una tarima flotante en toda nuestra vivienda sin excepciones.
En cuanto a los suelos vinílicos cuentan con múltiples ventajas pero una de las más importantes es que no requiere de obras para su colocación.
Las lamas y losetas autoadhesivas se pueden colocar sobre cualquier tipo de superficie no porosa.
En ambos materiales la plasticidad de su material y su bajo coste, sitúan estos suelos en una posición excelente si lo que desea es una instalación rápida y económica. Además, su material sintético ofrece una alta resistencia al agua y a las condiciones de humedad. Una gran gama de colores le están esperando